El manga de Katsura Hoshino se pausa otra vez por duración indeterminada en Japón a causa de una enfermedad de la autora, la recurrente excusa japonesa similar al “problemas con los materiales” español.
Lo cierto es que aún siendo una serie tan popular, tantos parones, cancelaciones y poca emoción hacen que esta noticia pase de ser percibida.
Aun siendo un manga con buenas ventas después de tantas pausas, escándalos por plagios, cambios de revista y shueishazos varios ¿quién tiene el aguante de seguir con interés una serie si encima el argumento ya es intolerable?
La serie es buena. Sin embargo, es cansado seguir una serie que parece solo sigue por inercia y sin un rumbo demasiado fijo o lo suficientemente interesante para atrapar a los lectores.
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